Desde su adolescencia, Lolibel Hernández tuvo la visión de crear impactos positivos en la educación ambiental dominicana. En los últimos cinco años, la chica originaria de La Romana, en el este de República Dominicana, logró impactar a más de 500 jóvenes sobre el cuidado medioambiental.
Raíz Climática, a través del proyecto de Hernández «Voces de la Tierra» fue también tomado en cuenta para capacitaciones a jóvenes deseosos por conocer e implementar medidas efectivas para el cuidado ambiental.
Lolibel ahora es finalista del Premio Nacional de la Juventud 2025, en la categoría «Preservación y Fomento de los Recursos Naturales», por su provincia La Romana. Y, en Raíz Climática, nos contó sus experiencias impactando a comunidades de su natal ciudad y al resto del país.
RC: ¿Qué te motivó a iniciarte en la preservación de los recursos naturales?
LH: Participar desde mis 14 años en el programa de Modelos de Naciones Unidas del Ministerio de Educación me dio una perspectiva de la responsabilidad ambiental que como sociedad debemos tener, lo que inspiró mi consigna de “Somos la última generación que tiene la oportunidad de salvar el planeta” que en lo adelante ha sido el motor de mi activismo por la defensa de los derechos del ambiente.

RC: ¿Qué impacto ha tenido tu iniciativa en la comunidad?
LH: Con Generación por el Desarrollo, mi emprendimiento social, desde el 2020 he podido impactar la formación +500 jóvenes en temas de cambio climático, protección de los océanos y activismo por la protección del planeta. Asimismo, hemos logrado impactar en +6 comunidades vulnerables como Río Salao y el Área Protegida de Río Dulce con operativos de limpieza y jornadas de capacitación.
RC: ¿Cuáles han sido los mayores logros que has alcanzado hasta ahora?
LH: Desde un principio tener la capacidad para identificar qué estaba necesitando mi provincia y la visión para saber qué podía hacer con las herramientas que tenía en las manos, así nació “Generación por el Desarrollo”, este proyecto a través del cual he creado programas como Voces de la Tierra y Mi Río, Mi Comunidad en alianza con organizaciones internacionales como Parley for the Oceans y el Proyecto Promar.
RC: ¿Qué mensaje le darías a otros jóvenes que desean involucrarse en la conservación ambiental?
LH: Primero, que esta es una causa que vale la pena, el futuro de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes está bajo amenaza por el cambio climático y sus consecuencias desencadenadas, en gran medida por nuestro comportamiento con la tierra. Segundo, que aunque no es 100% nuestra culpa es 100% nuestra responsabilidad lo que pase de ahora en adelante, quiero repetirlo “somos la última generación que tiene la oportunidad de salvar el planeta”.
RC: ¿Cómo crees que las nuevas generaciones pueden contribuir a la preservación de los recursos naturales?
LH: Deben conocer el problema ¿qué está pasando? ¿Por qué? ¿Cuál es la solución? Luego identificar cómo con las herramientas que tengan pueden aportar. También pueden considerar hacer voluntariado con organizaciones que ya están haciendo el trabajo de formar a otros y creando soluciones.
RC: ¿Cuál es tu visión para el futuro del medioambiente en la República Dominicana y el Caribe?
LH: Viviendo en una isla que posee riqueza natural, aunque aún así es limitada, con una posición geográfica que la coloca en la primera línea de amenaza contra el cambio climático y que a la vez depende económicamente del turismo, aspiro que podamos crear las políticas públicas que permitan la sostenibilidad y regeneración de nuestros parques naturales. El turismo nos da una gran oportunidad económica, pero necesitamos gestionar eficientemente nuestros recursos para que no existan cada vez menos corales, menos playas erosionadas, menos impacto negativo en el ambiente.
RC: ¿Qué apoyo consideras necesario para que más jóvenes se sumen a este tipo de proyectos?
LH: Es importante que empecemos a crear proyectos que consideren al sector público, sector privado, a la comunidad y la cooperación internacional como las 4 patas de una mesa donde se sostienen soluciones innovadoras, sostenibles y necesarias para luchar por un planeta y una isla más sana.

RC: ¿Cómo te sientes por ser finalista en esta categoría en tu provincia y qué harías si eres galardonado con el PNJ? ¿Qué te motivó a participar?
LH: El Premio Nacional de Juventud es una plataforma importante para la juventud dominicana, lo que me hace sentir orgullosa de ser finalista. Con la visibilidad que podría obtener al ser galardonada en este renglón quiero dar a conocer mi trabajo a través de “Generación por el Desarrollo”, con el propósito de crear relaciones, alianzas y proyectos que sigan impulsando la protección de los recursos naturales y el activismo por la defensa de estos.